miércoles, 8 de diciembre de 2010

No quiere romperla

Dime si eres tú quien me despierta,
quien inventa mi nombre con aires de loco,
quien no teme desesperar en mi puerta
mientras me obsesiono; ni morir tampoco.
Has venido. Pero, ¿dónde se han ido tus ojos?
Cometí la torpeza de gritar mi desaire,
le incluí sin miedo entre mis despojos
y a vivir me mudé a otra calle.
No es que me arrepienta.
Todo lo contrario.
En aquello no me reconozco.
Pero tampoco ahora me sé mi nombre.
Invéntalo tú, que tienes duende.
Que va, que va; no me siento sola.
Fuerte, digna, mar, corriente.
Nube de inmensa oquedad.
Aire de larga impaciencia.
Gota agitada de ola eterna,
sin orilla donde romper
porque no quiere romperla.

1 comentario:

Anónimo dijo...

MUY BONITO LOLA, NO TODO EL MUNDO ES TAN VALIENTE Y SABE CONVERTIR SU SUFRIMIENTO EN ALGO BELLO. UN BESO. CHELO