sábado, 7 de mayo de 2011

A las andadas

No sé pensar lo que siento,
ni sé sentir lo que pienso.
Voy despertando a momentos
que derrama, imprevistos, la vida,
y en esos ratitos me encuentro.

Son instantes compartidos,
que revientan.
Son fugaces recuerdos enterrados
que a la piel vuelven empujados
como tormentas.

Hoy me encontré en tu mirada.
Sin esperarlo volví a las andadas.
Y me tembló el corazón.

1 comentario:

Jota dijo...

Uyssss...los recuerdos...¡¡¡qué malos y qué buenos son a veces!!!!