viernes, 13 de mayo de 2011

Lo más grande

Tú me alumbraste.
Soy lo que por ti he vivido,
y de vivir con los ojos abiertos he aprendido.

Te abandonaste,
para andar mi camino delante,
para despejar mi cielo,
para soplar el aire a mi vuelo
y pelear mis fantasmas.
Eres el centro mismo de mi alma.

Tú me enseñaste,
a pararme en los detalles importantes,
a mirar a los ojos de la gente,
a escuchar con el corazón abierto,
y a encarar la vida de frente.
Esa vida que crees que se tuerce
porque nada te parece suficiente
para los tuyos.
Eres mi orgullo.

No puedo mirar a otro
sin compararle contigo.
No hay mejor amigo,
ni mejor pareja,
ni mejor compañero de viaje.
Y me desborda el pecho
poder llamarte padre.
No hay hombre más grande,
que dé más consuelo.
Si de padre eres gigante,
ni te imaginas de abuelo.

2 comentarios:

forestrynews dijo...

Perdón por entrar en tu espacio personal. Pero no me he resistido a decirte que me ha encantado esta entrada.
Tu padre debe estar orgullosa de ti.

Lola Pelayo dijo...

Gracias! Orgullosa es lo que estoy yo de él! Y no pidas perdón, es un rincón compartido. :-) Vuelve cuando quieras. Bss