lunes, 4 de abril de 2011

De momento


Si te cuento mis sueños
te descubro mi alma,
mi yo más profundo,
mi sabor interno,
mis secretos ocultos,
mis pensamientos.
Por eso no te los cuento.
De momento.

11 comentarios:

Anónimo dijo...

De tanto querer soñar
Soñé anoche que soñaba
Que no me iba a despertar
Al despertar la mañana.
De tanto querer soñar
Soñé anoche que soñaba
Que siempre iba a ser de noche
Y nunca más de mañana.
De tanto querer soñar
Soñé anoche que soñaba
Que del sueño que soñaba
Nunca me iba a despertar.
De tanto querer soñar
Sólo una cosa deseo:
Que vuelva pronto la noche
Y no se vuelva a marchar.
De tanto querer soñar,
De tanto soñar que sueño,
Ya de nadie envidia tengo,
Pues yo sólo sé soñar
Y a nadie soñar le veo.
De tanto querer soñar,
De tanto soñar que sueño,
Le puedo al tiempo matar
Sin que a mí me mate el tiempo,
Que en la eternidad me adentro
Cuando me pongo a soñar.

REBECA dijo...

Decir tanto, en tan pocas palabras... Amiga del alma, que nada ni nadie oscurezca nunca tus sueños

Lola Pelayo dijo...

Gracias Rebeca!! Y que tú compartas siempre esos sueños míos!!

Lola Pelayo dijo...

Y Anónimo...
Le puedo al tiempo matar
Sin que a mí me mate el tiempo,
Que en la eternidad me adentro
Cuando me pongo a soñar.

por qué?

Anónimo dijo...

La constancia de mí sueño, es atemporal, de ahí lo de anónimoatemporal.

Lola Pelayo dijo...

Pues creo que ha sido injusto, infantil, innecesario e inesperaado, la verdad. Pero respeto tanto las decisiones ajenas como las propias. Sigue escribiendo de vez en cuando. :-)

Anónimo dijo...

Me gustaría poder seguir asomándome, pero sin prisas, y con algo más de intimidad. Sin presiones de identidad.
En mís versos van mí vida. Te la muestro tal y como es. No te pido más, no necesito verte físicamente aunque podría acercarme, no necesito saber tú nombre, aunque lo conozca.
Mis letras me describen, y a tí las tuyas. Pensaba que lo que escribías tenía menos lectores, no me gustaría ser el guionista de un culebrón venezolano, donde la única intriga es conocer la identidad del padre de la criatura que está a punto de nacer.
Sí no te importa prefiero cubrír mi cara con la sombra de tu sonrisa.

Lola Pelayo dijo...

Por eso que un blog es abierto, no digo aquí lo que te diría en el único sitio que era posible, que posibilitaba lo que dices que prefieres, y que tú mismo has cortado. No importa. Un beso fuerte.

Anónimo dijo...

anonimoatemporal@gmail.com

Anónimo dijo...

madre mia

Anónimo dijo...

Ese último comentario no ha sido mío